5 maneras de comer fuera por menos dinero

por Manisha Thakor

Los tiempos difíciles presentan un interesante dilema financiero para nuestros estómagos.

Durante los periodos difíciles es natural y saludable buscar amigos y compañía. Compartir el pan y tener una buena charla es una forma maravillosa de liberarse del estrés del trabajo y la vida. Pero dadas nuestras ajetreadas vidas, muchos de nosotros acabamos pasando tiempo con otras personas mientras comemos fuera... lo que realmente puede sumar. Así que aquí tienes 5 cosas sencillas que puedes hacer para comer fuera por menos dinero.

1.    Comparte un entrante o haz una comida a base de aperitivos: En la América moderna, las raciones son tan grandes que una comida normal puede alimentar al menos a dos... y a veces incluso a tres personas. Para evitar sorpresas a la hora de pagar la cuenta, asegúrate de que el restaurante no cobra un suplemento por cada plato principal. Por otro lado, algunos aperitivos son tan grandes que podrían llenarte fácilmente como plato principal y, por lo general, cuestan la mitad que éste.

2.    Asegúrate de preguntar cuánto cuestan los especiales antes de pedirlos: Este es uno de mis temas favoritos. ¿Cuántas veces te has encontrado en un restaurante cuando el camarero te describe un plato que suena suculento? Te lanzas a por él, pero luchas contra las ganas de vomitar cuando ves la cuenta y te enteras del precio. Personalmente, creo que es un signo de confianza en uno mismo desde el punto de vista económico preguntar amablemente "¿cuánto cuestan los platos especiales? Al principio puede resultar incómodo, pero créeme, toda la mesa te lo agradecerá y marcarás tendencia.

3.    La sopa, hace bien al cuerpo: Un buen plato de sopa sustanciosa (gumbo, estofado de ternera, sopa de tortilla o chili) suele costar mucho menos, contener ingredientes más sanos y saciar tanto como un plato principal normal.

4.    Piensa antes de beber: Las bebidas -alcohólicas e incluso no alcohólicas- son productos con márgenes muy elevados para los restaurantes. Como mínimo, piénsatelo dos veces antes de duplicar el consumo. Si puedes, saborea una bebida durante toda la comida. Y si de verdad quieres reducir el consumo, opta por lo mejor de la naturaleza: un vaso de agua del grifo. De este modo, puedes recortar fácilmente 20% o 30% de tu cuenta (¡por no hablar de los kilos de tu cintura!).

5.    Haz la comida: Si tienes muchas ganas de quedar con tus amigos en un restaurante de lujo, prueba a hacerlo a la hora de comer. Los precios son mucho más bajos, las raciones más realistas y es menos probable que te pases con la cuenta del alcohol.

Y tú, ¿tienes alguna otra sugerencia que añadir a esta lista?

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